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"STRANGER THINGS"
Dirección: Hermanos Duffer, Shawn Levy y Nimród Antal
Guion: Hermanos Duffer, Caitlin Schnaiderhan, Paul Dichter, Kate Trefry y Curtis Gwinn
Reparto: Millie Bobby Brown, Gaten Matarazzo, Noah Schnapp, Joe Keeri, Natalia Dyer
Duración: 7 episodios
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Ha llegado el día. Parecía que nunca iba a llegar, p ero llegó. Tres años después del estreno de la última temporada de la serie vuelve Stranger Things, uno de los mayores bombazos de los últimos años. La serie prometía mucho y esta cuarta temporada ha sido mucho más ambiciosa. Para bien y para mal.
Estos días ha sido polémico por internet la duración de los capítulos, de media unos 75 minutos por capítulos, unos 20-25 minutos más largos que las temporadas anteriores y además episodios que superan los 90 minutos, incluso el último (que se estrena en julio) llegando a los 150 minutos. Y aunque no es tan negativo como podía parecer (supone una ampliación considerable de la narrativa de la serie), se hace pesado y cuesta.
El viernes Netflix nos puso disponibles los screeners (los capítulos que todavía no se han estrenado) a prensa, y por ciertas cosas empecé el domingo por la tarde a verlos. Y aunque no llegué al embargo, he intentado verla lo antes posible y he de decir que, igual no renta mucho hacerlo así. Está bien ver un episodio o dos al día, pero más no. Se hace muy pesado a ratos y cuesta.
Y te das cuenta de que hay bastante relleno. La trama de Joyce o la de Once en el instituto son básicamente relleno que no aporta nada. Aunque la primera sí que se le da un sentido al final pero en el fondo tampoco lo entiendo. Supongo que en los episodios finales lo dejarán más claro.
Y ocurre continuamente. Creo que de cada episodio podría haber sido fácilmente 15 minutos más corto. Y si no, al menos partir los episodios.
Es decir, la temporada tiene nueve episodios, pues estrenar ahora 5 y luego 4 por ejemplo. Pero es que 7 (y el último con 98 minutazos de duración) pues se hace cuesta arriba.
Aunque esto permite también abrirse mucho más a la serie. Hay muchos más personajes, muy interesantes también y, además bien desarrollados.
También tramas secundarias que van cogiendo peso y se van resolviendo muy bien y que la verdad no nos podemos quejar de ello. Ese relleno está compensado de alguna manera, porque sirve para rellenar huecos vacías entre tantas tramas que se abren y que son realmente interesantes.
Y creo que esto hace a la hace (a la temporada) menos redonda que las anteriores. Sigue funcionando muy bien y siendo muy buena, pero las otras están mejor controladas en duración y construcción narrativa y quedan mejor "talladas". Si las dos primeras temporadas eran de 9 y la tercera para mí era de 10, esta se quedaría en un 8.
Pero vamos, no significa que sea mala. Es divertidísima, más divertida que las anteriores, y eso es básicamente gracias a su enfoque más adulto.
La acción es más sangrienta, más potente, tiene ideas mucho más oscuras y planteamientos bastante más adultos (fíjese en Max en el episodio 4) y que hace la serie mucho más entretenida que las anteriores,
Y que la serie sea más adulta tiene sentido. Tiene sentido que la serie sea más "adulta" teniendo en cuenta el ver cómo los entonces niños ya son casi adultos, y cómo van madurando y enfrentándose a los problemas.
Esto también ayuda al desarrollo de personajes, que de nuevo, está bastante bien, sobretodo teniendo en cuenta que en otras series como esta se suelen quedar descripciones mucho más superficiales.
Además a todo esto, visualmente la serie es impecable. Tiene una gran dirección y cumple perfectamente, entregando momentos muy épicos, otros terroríficos o incluso cómicos.
Es verdad que se nota cierto cambio entre la dirección de los Hermanos Duffer y la de Shawn Levy y Nimród Antal, porque se nota que tienen mucha más destreza en el fantástico y en su puesta en escena, y queda mejor resuelto, aunque en términos generales tiene una muy buena dirección. Me quedo sobretodo con los planos secuencia del primer episodio y los planos de los últimos episodios que enlazan el mundo con el mundo del revés.
Pero a parte de todo esto, lo que realmente gana son sus actores y actrices. Gracias a la serie se han hecho muy famosos pero su forma de actuar sigue siendo genial. La pandilla de adolescentes sigue enganchando mucho (y sorprendiendo con su fabulosa química y talento ante grandes momentos dramáticos) y los adultos también tienen muy buena química y resultan aún más carismáticos. Aunque, esta temporada tiene dos claros reyes.
Una es Sadie Sink, que adquiere el protagonismo absoluto durante el capítulo 4 y que funciona súper bien (ojo con el finalazo del episodio) y que tiene grandes momentos dramáticos en los que se luce totalmente para demostrar lo gran artista que es.
Y el otro es Robert Englund. Sólo aparece en un episodio (también el cuarto) pero que en los pocos segundos que sale se come la pantalla. Está realmente bien. Lo mejor del reparto probablemente.
Y además verle ahí es ciertamente gracioso, porque en esta temporada se menciona a Pesadilla en Elm Street, que Englund protagoniza, a parte de homenajearla visualmente y argumentalmente y después verle ahí pues mola mucho de alguna manera. Además su personaje es súper bestia y oscuro, lo que Englund sabe hacer perfectamente.
En el fondo, esta cuarta temporada de Stranger Things no será tan buena como las anteriores, pero creo que es la más disfrutable (y terrorífica) de todas. Uno se lo pasa muy bien, y tiene ganas de más.
No tengo mucho más que decir sin spoilers, porque es complicado no spoilear, así que me voy a quedar aquí y tal vez a partir de su estreno el viernes comente algunas cosas en redes sociales o en otra crítica con spoilers. El mejor episodio el cuarto. Quedáos con eso.
Puntuación: ★★★★
Estreno (Volumen 1) el 27 de mayo en Netflix
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